La lengua catalana representa una parte fundamental de nuestra comunidad, fielmente expresada en la identidad cultural y social; y de la historia de nuestra institución. Su uso diario en la comunicación, la educación y la vida social contribuye a la cohesión de nuestra sociedad y al fortalecimiento de un sentido compartido de pertenencia.
En Prat Educació, la promoción del catalán se ha convertido en una prioridad que trasciende la simple práctica de una lengua; este esfuerzo es vital para enriquecer la experiencia educativa de nuestros jóvenes y ayudarles a conectar profundamente con sus raíces. Nunca perder nuestra identidad y tradición cultural que nos ha mantenido ligados durante nuestros 100 años impartiendo valores y educación en este lenguaje.
Fomentar el uso del catalán en nuestras aulas no solo contribuye a preservar una lengua que forma parte de nuestra herencia cultural, sino que también fortalece la identidad de los estudiantes. Al interactuar en su lengua materna, los jóvenes desarrollan un sentido de pertenencia a su comunidad que es esencial para su bienestar emocional y social. Este sentido de pertenencia les motiva a valorar y mantener vivas las tradiciones y costumbres que han sido transmitidas de generación en generación.
En la actualidad, los jóvenes se enfrentan a un entorno cada vez más globalizado, donde el dominio de varias lenguas se convierte en una habilidad altamente valorada en el ámbito laboral y social. Promover el uso del catalán no significa rechazar otras lenguas; al contrario, se trata de complementar el aprendizaje de diferentes idiomas y fomentar una perspectiva bilingüe. En este sentido, nuestro centro de formación entiende que el catalán debe ser utilizado como una herramienta que permite a los estudiantes navegar entre diferentes culturas, mientras se afianzan en sus propias raíces.
Para Prat Educació, implementar iniciativas que fomenten el uso del catalán en el entorno académico también enriquece la experiencia educativa en su conjunto. A través de actividades, proyectos y recursos didácticos en catalán, los estudiantes tienen la oportunidad de aprender en un ambiente que celebra y respeta su lengua y cultura. Esta inmersión lingüística no solo mejora su rendimiento académico, sino que también promueve un ambiente de respeto y colaboración entre los estudiantes, quienes aprenden a valorar la diversidad lingüística y cultural que los rodea.
Nuestros jóvenes estudiantes no solo mejoran su capacidad de comunicación, sino que también desarrollan habilidades que les permiten destacarse en sus futuras carreras. Estamos a la vanguardia y por ello, el inglés y francés también forman parte de nuestro plan de estudios: las empresas buscan candidatos que puedan interactuar con diferentes públicos, manejar relaciones internacionales y colaborar con equipos multiculturales. En este contexto, el catalán y las demás lenguas impartidas se presentan como una herramienta incalculable que puede abrir puertas y ofrecer ventajas significativas en el ámbito profesional.
Es por ello que las aulas se convierten en espacios donde no solo se enseña, sino que se construyen identidades. Los jóvenes pueden expresarse libremente en su lengua, lo que fomenta la confianza y la seguridad en sí mismos, así como el desarrollo de habilidades críticas que son esenciales en su futuro personal y profesional. Para nuestro centro de formación superior, se ha convertido en una tarea crucial que va más allá del aprendizaje de una lengua, tiene un impacto significativo en el desarrollo de competencias profesionales y personales de nuestros jóvenes.
La inmersión en el catalán en nuestro contexto educativo fomenta el desarrollo de competencias transversales. Los estudiantes aprenden a trabajar en equipo, a resolver problemas de manera creativa y a comunicarse de manera efectiva. Estas habilidades hacen parte de nuestros valores organizacionales, nos identifican como una institución de tradición catalana, ubicada en una zona céntrica de Barcelona que siempre promueve una tradición cultural y sentido de pertenencia para a su vez graduar a ciudadanos comprometidos, conscientes y responsables de su ciudad, su historia y sus raíces.
